martes, 5 de septiembre de 2017

El teatro guiñol como herramienta para fortalecer la resiliencia ante inundaciones de las comunidades


Dentro de las actividades del Programa de Resiliencia ante Inundaciones se ha empezado a presentar en varias comunidades la obra “Fuerte como el árbol de Tinto” en teatro guiñol, la cual está dirigida principalmente a los niños, no obstante, la participación de los adultos ha resultado significante.



El objetivo del teatro guiñol es buscar la interacción con los habitantes de las comunidades para así volver cotidianos los temas relacionados con la Reducción de Riesgo de desastres para que actúen de manera preventiva en sus comunidades.

Creada por el equipo del Programa de Resiliencia ante Inundaciones, en colaboración con los Juventinos de la Cruz Roja Mexicana de la Delegación Estatal Tabasco, esta obra “Fuerte como el árbol de Tinto” tiene el interés de informar sobre las acciones de prevención y preparación ante inundaciones, y con ello, cuestionar a los niños si están preparados ante las inundaciones.

La obra se desarrolla en cuatro actos y los personajes principales son caracterizados por una familia constituida por el papá, mamá, hija e hijo y los dos abuelos maternos, todos ellos, personajes clave en cualquier comunidad para la transmisión del conocimiento local.

Primer acto. Camino a la escuela
El tema principal del primer acto es el conocer el entorno para vivir mejor. A través de pláticas cotidianas entre los miembros de la familia y con los maestros de la escuela se expone la necesidad de asistir a las juntas comunitarias para allí exponer las necesidades de la comunidad y poder abordarlas de manera colectiva. En los diálogos sutilmente se introducen los conceptos de la Reducción de riesgo de desastres.

Segundo acto. La experiencia de mi comunidad
A través de una reunión entre ancianos, en este acto se desarrolla el tema de la recuperación de la memoria histórica como fundamental para reconocer e identificar las acciones que se hicieron hace muchos años frente a las inundaciones. En este acto los abuelos narran un cuento a los nietos para compartirles que generación tras generación la historia oral ha servido para saber que cuentan con elementos para protegerse, que únicamente es cuestión de compartirlos entre las generaciones para continuar su reproducción y evitar su pérdida. Asimismo, destacan la necesidad de colaboraciones colectivas como son las brigadas, la protección civil y la Cruz Roja.



Tercer acto. Cocinando la respuesta
En este acto convocan a una reunión de padres de familia para señalar la importancia de contar con un Plan Familiar de Emergencias e identificar y entender los colores usados en el Sistema de Alerta Temprana. Igualmente enfatizan las necesidad de conocer ante cuáles amenazas naturales están expuestos y así enfocar sus Planes Familiares de Emergencia, así como orientar sus vidas cotidianas. Particularmente en este acto ejemplifican con situaciones de la vida real el concepto de vulnerabilidad, asegurando que los habitantes lo hagan suyo a partir de sus propias vivencias.

Cuarto acto. Lluvias y crecientes
La obra concluye con la puesta en práctica de los elementos expuestos en los actos anteriores. La comunidad se enfrenta a las crecientes y en virtud de que estaban organizados como comunidad y contaban con la brigada, así como con las rutas de evacuación y el punto de reunión para protegerse, lograron protegerse y demostraron su nivel de resiliencia ante inundaciones. Así concluyen, asumiendo su fortaleza, diciéndose a sí mismos que son fuertes como el Árbol del Tinto, nombre que le da título a la obra.